porque quiero hacerlo bien, creo que lo hago más o menos bien (realmente, muy bien), no quiero defraudar, no quiero «bajar el nivel», quiero hacer un buen artículo, me cuesta mucho hacer buenos artículos y tengo miedo de que si escribo más se darán cuenta de que no lo hago bien , de mí veo todos los errores que hay antes de entregar un artículo acabado, de los demás que escriben sólo veo el producto final (y esto me descorazona), tengo 200 pre-artículos medio-empezados pero no acabados porque no son lo suficientemente buenos, me pongo el listón alto pero esto no significa más que tardo mucho en empezar y mucho en acabar, experimento poco (si experimentara más tendría material para escribir dos artículos al día), quiero escribir sin muchas faltas de ortografía o de sintaxis, creo que lo digo es principalmente banal, siento que estoy robando ideas a los demás y que pocas son genuinas, por eso quiero que el robo no se sienta demasiado y tengo que buscar maneras de disimular el robo, pienso que si escribo algo no puedo borrarlo, pienso que si hago alguna estupidez dejarán de leerme, creo que quien hace estupideces es estúpido, hablo de la mentalidad experimental y el sentido del ridículo pero no pongo mi dinero donde está mi boca, no me gusta que se noten los calcos del inglés y de otros que piensan y escriben, me lo pienso mil veces antes de decidirme por un tema, creo que este blog es una estructura que hay que planear cuidadosamente, aunque digo que el blog crece orgánicamente realmente crece según un diseño ideado hace mucho tiempo, porque no me separo de los planos, porque la improvisación se me da mal, porque creo que la improvisación es chapuza, porque es difícil decir cosas con pocas palabras, porque se supone que soy minimalista en la expresión, porque, según dice Rubén Arribas de Aviones desplumados que dijo Baltasar Gracián, más obran quintaesencias que fárragos, porque cada día me salen más palabras a pesar de que querer ser sintético, porque una vez que empiezo no sé dónde acabar
Nos pasa a todos los que escribimos en blogs pero he de reconocer que, en demasiadas ocasiones, ese borrador que lleva ahí desde tiempo ha, se cae y se publica. Otros los borro sin miramiento alguno y vuelvo a empezar.
Y tiempo. Para escribir hace falta tiempo. La gente no se lo cree y me da risa.
Voy a buscar a Gracián, otra vez. (¡Fárragos! -qué bella palabra-)
Muchos artículos están ahí esperando su turno, madurando hasta que les llegue el momento. Lo bueno es que sientes que hay un montón de ideas que un día tomarán forma.
Me he emocionado con este articulo! Que valor!
No se si yo seria capaz de descubrir mis facetas sombrias, ocultas por el sentido de ridiculo como lo hiciste aqui. !Eres un MAESTRO!
Besos!
Me voy a ruborizar…
Yo te leo con regularidad y siempre me aporta algo. Quiero hacerte un comentario, que seria personal si tuviera otro medio. Veo en tu «confesión» varios trazos de una personalidad obsesiva-compulsiva. Esa expresión es fuerte pero no hay un nombre más discreto. Lo importante es reconocer cuando está causando problemas. Desistir de una actividad importante porque se piensa que no es lo suficientemente bueno o meritorio es uno de sus caracteristicas. El perfeccionismo es otra. El problema està en que todo esto lleva asociado un nivel de ansiedad grande que puede avanzar y causar estragos. Piensalo y busca ayuda… como dice un amigo: «hay problemas que uno no puede subestimar». Abrazo!
Gracias por tu comentario y sinceridad.
Sí, supongo que soy algo obsesivo-compulsivo; pero no creo que necesite tratarme. Supongo que es un rasgo que hay que aprovechar.
L2: ¡Mira Woody Allen! 🙂
Me hubiera gustado más que hubieras dicho: «¡Mira,Joyce y su monólogo interior! Pero bueno, también está bien, te habrá sonado más a neuroticismo que a recurso literario.
Se agradece tu sinceridad. A veces aporta más lo que se ve que hay detrás de las palabras (la persona) que el propio contenido del artículo.
Ventajas de internet.
Para ser todavía más sincero, tengo que decir que este artículo es una forma de mostrar la idea de mentalidad experimental y para preparar otro artículo en que hablaré de la técnica de escritura libre.
Para ser un poco más sincero aún, si cabe, tengo que decir que aunque hubiera razones detrás del artículo, la escritura de él fue más bien un impulso.
Bien hecho, HM, cada tanto hay que saber descargarse de responsabilidad y dejarse ir, sencillamente dejarse ir… y disfrutar de que las manos vuelen sobre el teclado, de que fluyan libres las asociaciones sin preocuparse tanto de la sintaxis, los párrafos o la idea global; ya habrá tiempo más adelante de trabajar con ese material en bruto y darle forma. En fin, que los surrealistas tenían su parte de razón en aquello de usar la escritura automática como herramienta de prospección del inconsciente. Feliz experimentación, compañero.
PD 01. Por lo demás, y pese a que algún comentario barrunta esa posibilidad, juraría que usted jamás se dejaría vencer por las ansias del perfeccionismo… ¡Acabáramos! Pero si de usted aprendí yo aquello del 80/20 y que «lo mejor es enemigo de lo bueno». Algo que a mí me vino muy bien, por cierto, en mi vida laboral.
PD 02. Su entrada me ha hecho pensar «¿por qué no leo más este blog?» 😉
¡Qué bueno! Homo Mínimus, no dejas de sorprenderme 🙂
Pocos blogs sigo desde hace tiempo como el tuyo…mas bien ninguno diria yo…me gusta lo que trasmites y he de decirte que cada vez eres mejor…tus articulos me parecen mucho mas cercanos que los primeros…hay una evolucion importante…al menos,desde mi punto de vista
Un beso HM
Yo tenía esas mismas ideas en mente, pero lo cierto es que entre más escribo, lo hago mejor. El truco principal es que ahora intento hablar de lo que yo hago y experimento y pontificar menos.
En el fondo creo que es un problema de como dirían los americanos «procastination», usando la falta de perfección como una especie de excusa para diferir la conducta, para retrasar la acción y mantenerse en el plano de lo mental y no de lo real.
Ya sabes Homo minimus que creo que la única pega que se le puede poner a tu blog es que se actualiza cada demasiado tiempo. La entrada de esta vez es muy buena y muy honesta, (me gustó ese «realmente muy bien») atrevida y experimental, pero eso no me hace cambiar de opinión en mi idea de fondo de que habrías de escribir más artículos porque tienes los conocimientos y la dedicación necesaria para ello.
No sé otras personas, pero yo preferiría más artículos con algún que otro fallo que menos sin fallo alguno.
Un saludo.
Cuando me preguntan «por qué no escribo», les contesto que la pregunta correcta es «por qué escribí»: Jaime Gil de Biedma hablaba así del «cierre» de su obra.
Pero no quiero que respondas al por qué escribí. Solo quiero decirte que algunos (muchos) de tus escritos me han tocado, han cambiado mi perspectiva, me han hecho tomar aire… en definitiva han servido para lo que todos queremos: para comunicar y «transformar» la vida del que nos lee.
Y lo siento alquimista oscuro, yo no preferiría más artículos con más fallos. Eso es ruido, el madito ruido de la blogosfera. Cacofonías de lo mismo una y otra vez. Me parece bien que alguien nade contracorriente y vaya a la esencia…