Hoy lunes 3 de junio de 2019 comenzamos el experimento público de desconexión digital. Serán cuatro semanas hasta el domingo 30 de junio 2019.
Las condiciones y justificación del experimento las tienes aquí.
La página para registrarse en el experimento es esta.
Estos son algunos ejemplos de compromisos de desconexión digital que pueden servirte de inspiración para diseñar el tuyo:
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Marc Martí
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Abvy
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Elena
- Ejemplo compromiso desconexión digital.: Artak
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Melisa
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Tania
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Verónica
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Homo Mínimus
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Gavroche
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Cristina
- Otros ejemplos compromiso desconexión digital: Alberto, Ruth, Dweeko (en página registro experimento)
El plan es el siguiente
- Al principio de la semana, el lunes, daré el pistoletazo de salida con un artículo para una nueva iteración del experimento. En ese artículo, en la sección de comentarios, los participantes podrán redefinir sus objetivos o añadir detalles y hacer comentarios durante toda la semana. También servirá para motivarnos mutuamente y buscar consejo o ayuda.
- Al final de la semana, el domingo, en otro artículo, a la luz de mi propia experiencia y la de los otros participantes en el experimento, haré una revisión-resumen de las lecciones aprendidas, impresiones y experiencias de los participantes hasta el momento.
- Repetiremos cuatro veces este ciclo.
- Podrás empezar este experimento público y registrarte en la página correspondiente en cualquier momento durante estas cuatro semanas. De todos modos, cuanto antes mejor.
Serie Experimento de desconexión digital:
- Antisocial: anuncio del experimento
- Experimento minimalista de desconexión digital
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Marc Martí
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Abvy
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Elena
- Ejemplo compromiso desconexión digital.: Artak
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Melisa
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Tania
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Verónica
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Homo Mínimus
- Ejemplo compromiso desconexión digital: Gavroche
- Primera semana experimento desconexión digital.
- Revisión primera semana experimento desconexión digital
- Segunda semana experimento desconexión digital
- Revisión segunda semana experimento desconexión digital
- Tercera semana experimento desconexión digital
- Revisión tercera semana experimento desconexión digital
- Cuarta semana experimento desconexión digital
- Revisión final experimento desconexión digital
Homo Mínimus 
Yo hice algo parecido en su día, durante unas vacaciones. Escribí mis conclusiones aquí…: https://blog.raulhernandezgonzalez.com/2015/07/de-vacaciones-con-un-dumbphone-after/
Sí, lo leí en su momento; es muy interesante. La vuelta de tuerca respecto a tu experimento es que lo llevamos a cabo en un periodo normal en el que hay que seguir equilibrando obligaciones profesionales, personales y demás. También queremos que el experimento arroje motivación para mantener los cambios más allá de un mes.
Echando la vista atrás, una lección aprendida: la motivación puede surgir, pero si no cambiamos hábitos (introduciendo elementos de diseño en el entorno, por ejemplo) la cabra volverá al monte antes de darnos cuenta.
Ánimo a todos!!
Enga va, vamos a comentar, companieros. Esta semana empecé muy bien… hasta que después de una semana, entré en Twitter, por varias razones. Luego, ayer continué horas mirando vídeos de Youtube hasta irme a dormir. Hoy más de lo mismo (y quizás peor aún).
Puedo explicar las razones por las que pasó (que constituyen parte de la razón), pero esto es el pasado. He aprendido que los compromisos no son decir «voy a hacer algo sin fallar» sino que «voy a hacer algo, y si fallo, lo volveré a intentar».
Algunos comentarios:
1. Insisto en que realmente necesito pasar más tiempo solo o simplemente necesito tiempo donde estar escuchando nuevos Podcasts, o vídeos o lo-que-sea.
2. Soy muy consciente de que cuando «caes» la tendencia es a continuar haciéndolo, porque total «ya la has cagado». El ya conocido efecto «What The Hell».
3. Hace un rato he pensado que realmente estoy utilizando más aplicaciones de las estrictamente necesarias.
4. Soy consciente a veces, mientras estoy con el móvil, estoy procrastinando de algún modo. Miro un vídeo y yo mismo pienso «Marc, sabes que estas perdiendo el tiempo, ¿verdad?» «¿Sabes que estas mirando el móvil porque tienes que ir a fregar los platos pero estas cansado en el sofá y mirar el móvil es una forma de evitarlo?»
5. Escribiendo este último comentario me ha hecho recordar algo muy simple: que somos humanos. Y con esto quiero decir que todos aquellos que estamos haciendo el proceso deberíamos ser conscientes que el cambio a veces no es rápido, que no somos robots y que simplemente debemos ser conscientes de aquello que nos aporta valor y continuar actuando hacia esa dirección. Debemos hacer el máximo esfuerzo pero si a veces fallamos, no es necesario extra-criticarnos, y simplemente, volver a empezar.
¡Suerte a todas y a todos!
Querido HM, sin intención de realizar spam, enlazo aquí (https://marcnmore.com/2019/06/07/un-experimento-de-seis-meses/) un articulo que he escrito sobre el tema ahora, que quizás pueda resultar interesante a algunos. Creo haber hecho alguna reflexión interesante. ¿Cómo vas?
Saludos,
Marc
Hola a todos. Pasada ya casi una semana de desconexión quería compartir qué tal ha ido.
Me había propuesto dejar mis redes sociales, Facebook e Instagram, y limitar el uso del móvil en general, y no utilizar ni móvil ni ordenador directamente a partir de las 19:30. Puedo decir que he conseguido mis objetivos. Si bien no ha sido una desconexión total porque he seguido usando internet en algún momento desde el ordenador, ha sido poco, dirigido por mí, es decir, no tragándome lo que el algoritmo me pusiera en el plato, y sin sentirme fuera de control.
Creo que la mayor diferencia con respecto a otros intentos ha sido que me haya atrevido a eliminar mis cuentas y no solo a intentar controlar mi uso de ellas, porque sé que en algún momento podría haber dicho: “voy a entrar, cinco minutitos nada más…” y de ahí a la perdición… Realmente no las echo mucho de menos como tales, por su contenido, digamos, sino más como una acción refleja a la que ya no tenía acceso. Probablemente hay cosas de las que dejo de enterarme, al menos en su momento, y que oigo después, con un comentario de ¿no te has enterado de…?, pero no me está afectando tanto como pensaba. Aunque creo que he perdido la cuenta de Instagram, en vez de haberla desactivado temporalmente, y eso me ha dado algo de pena, por perder mi “huella o diario digital”. Pero, tampoco ha sido dramático.
¿Soy mejor ser humano ahora? ¿Qué cambios he notado? Pues no sé, no es que ahora sea un ser más elevado o inteligente y que ese tiempo recuperado lo esté dedicando a una obra sublime, pero si he notado que estoy más presente. A lo mejor puedo seguir pensando en tonterías, pero sí que noto que son al menos “mis tonterías”, mis problemas diarios, mis sentimientos, y no los que dictan los contenidos con los que te vas topando. Bueno, sigo viendo algo de televisión o leyendo noticias, pero la cantidad de información externa que me influye se ha limitado bastante.
Hago ciertas cosas con más atención porque no las interrumpo cada rato con un “y ahora voy a entrar un momentito a ver qué hay de nuevo en …” Por ejemplo, si estoy en la cocina ahora no espero a que la sartén se caliente mirando el móvil sino que puedo estar más pendiente del siguiente paso o de si voy recogiendo algo mientras. Ya digo, nada elevado, pero es mejor que antes. En esos ratos tontos de espera que antes llenaba con el móvil ahora o no hago nada, o he sustituido el móvil por repasar un cuadernito en el que anoto vocabulario que quiero aprender en italiano, idioma que estoy estudiando. A lo mejor sigo necesitando llenar esos momentos, pero al menos siento que es provechoso.
Cuando a partir de las 19:30 empezaba la desconexión digital sí que me he sentido en algún momento algo perdida porque quería ocupar ese tiempo en algo útil, en algo menos pasivo, y digamos que he sentido un poco de presión y de indecisión, indecisión que antes me podía llevar a simplemente coger el móvil. Pero ahora, poco a poco he ido haciendo cosas, inventando y de nuevo, aunque no hayan sido cosas que me vayan a cambiar la vida o a mejorarla sustancialmente, han sido un cambio con respecto a antes.
En resumen, estoy contenta. A ver cómo se da el fin de semana…
Un saludo a todos.
Mi valoración de estos primeros días del reto es bastante positiva.
De Twitter ni me he acordado.
Además, improvisadamente, he subido la apuesta de mi compromiso empezando también a prescindir o reducir noticias de medios de comunicación. He suprimido mi suscripción a un podcast de actualidad política que escuchaba a diario y también he dejado de entrar en periódicos digitales.
Posiblemente sea un poco de empacho después de tanto ruido con tantas elecciones y sus respectivas campañas como hemos tenido en España en los últimos dos meses. Así que no quiero estar al tanto de todos los movimientos, negociaciones de pactos postelectorales, etc. Cuando se forme gobierno me enteraré. No necesito saber todo el proceso. No es algo a lo que le quiera regalar algo tan valioso como mi atención. No me hace falta saberlo todo al momento para estar informada (aunque nos hagan creer que sí).
Respecto a Youtube, entre semana también lo he llevado bien. Mis obligaciones del día a día hacían que tuviera cosas que hacer prácticamente en cada momento. Por la noche no he sentido la tentación de ver algún vídeo para entretenerme. Pero el viernes por la tarde y el sábado, sí. Es cierto que he hecho un uso bastante más moderado, pero reconozco que está siendo el terreno más resbaladizo. Esto me hace reflexionar sobre la importancia que puede tener en el éxito de un reto que consista en eliminar algo decidir si vas a sustituirlo por otra cosa o no. El vacío siempre tiende a llenarse. Supongo que por eso había que pensar en el reto qué íbamos a hacer con tanto tiempo libre. Si no, es más fácil acabar por llenarlo con lo anterior, ya que tienes esa inercia.
En global, estoy contenta. Noto que mi atención es mejor y me siento más descansada.
Vamos a por la siguiente semana.
Hola a todos. En mi caso logré mi objetivo durante la jornada laboral, especialmente los primeros días de la semana en los que casi no toqué el celular.
El resto del día no logré disminuir el acceso a periódicos digitales ni sitios similares, creo que por el contrario, usé más el teléfono que otras semanas.
A partir de mañana agregaré un recordatorio al teléfono con el nombre de dieta digital para recordar mi propósito durante todo el día.
Fuerzas para todos!
¡Hora de comentar progreso! Para hacer más llevadera esta primera semana la he ocupado con planes que me obligaran a pasar menos tiempo en soledad y sentir así menos necesidad de comunicación masiva. Instagram fue completamente omitida, y en cuanto a Twitter y Youtube, conseguí ceñirme a mi norma personal de solo abrir enlaces que me fueran enviados. Estoy pensando en modificar mi prohibición de Youtube y permitirme al menos algún vídeo de provecho para el rato en el que estoy desayunando.
Para las series había propuesto ver un solo capítulo de lo que fuera, pero ha habido días en los que no lo he necesitado. Sin embargo, como punto flojo e inesperado me vicié a un cómic desde el móvil y no lo solté hasta devorar todos sus capítulos.
¿En cuanto a cómo he empleado mi tiempo? He eliminado un par de libros de mi lista de lectura y he mandado unos cuantos trabajos. He disfrutado de tiempo para mí mismo (desde fuera se puede ver como no hacer nada) y he pensado en argumentos que aún tengo pendiente pasar a papel o a ordenador.
Para esta semana mis objetivos seguirán siendo los mismos, pero voy a intentar mejorar también mi horario de sueño.
¡Ánimo, participantes!
Hola
De entrada, tenía unos paquetes pendientes de mercado libre y amazon y toda la semana entré, me sentí un poco culpable por eso, pero lo cierto es que entraba específicamente a ver mensajes de los vendedores y ya.
No sabía que existía Blocksite, lo vi en sus comentarios y me ha ayudado mucho.
Con blocksite, ya no puedo ver las páginas de noticias, mis mañanas han sido más productivas, pero invariablemente me quedo viendo el monitor por un rato sin saber qué hacer, hasta que le doy la indicación a mi cerebro de ponerse a trabajar.
No ver el twitter y las noticias me ha hecho sentir muy libre, me preocupaba mucho no estar al día. El jueves vi a unos amigos y lo que menos quería era platicar de política, quería que me platicaran de su día a día, eso fue nuevo para mí y nos la pasamos muy divertido.
A mis hijos les dije que les tenía una buena y una mala, la mala verían menos el ipad, la buena, ya no iba a tener twitter, les pareció perfecto.
Lo difícil:
Me pongo de malas en mis largos trayectos en transporte público, que es cuando me la pasaba en el twitter, no me ha sido nada fácil ponerme a leer libros.
Ahora en las noches me pongo a leer nuevamente cuentos con mis pequeños, pero ya que se durmieron me da síndrome de abstinencia.
He andado papaloteando en Facebook y aunque sean unos minutos, tengo otra vez esa sensación de vacío.
En resumen, tengo espacio para darme cuenta que me he vuelto una maestra en la evasión, con el trabajo es fácil, es muy claro lo que tengo que hacer, pero con mis proyectos personales me quedo sentada sin atreverme a comenzar y deseando abrir el explorador a ver que encuentro.
Saludos, compañeros.
Se me fue sin nombre, Soy Elena
Gracias, Elena, ya me había percatado de que eras tú (por la IP y porque hablas de tus hijos). Muchas gracias por tu comentario, creo que mucha gente puede sentirse reflejada en tus comentarios. Tu sinceridad contigo mismo es digna de elogio. Estoy seguro que tus hijos recordarán siempre esos cuentos antes de dormirse.
¡Mucho ánimo y adelante!