Los diez mandamientos del aprendizaje

  1. Aprende aquello que genere un resplandor en tu espíritu. Dicho de otra manera, haz lo que amas.
  2. La pasión y la inspiración están sobrevaloradas. No siempre estarás al 100% de energía y motivación. Sigue adelante igualmente. Ama lo que haces. Ama el proceso.
  3. Vida y aprendizaje no son compartimentos estancos. La mejor forma de aprender es estando presente en tu propia vida e involucrado con tu entorno social y geográfico. La separación vida–aprendizaje  es un residuo del sistema de línea de montaje de la educación del siglo XX.
  4. Aprende haciendo. Convierte tus metas de aprendizaje en proyectos en los que quieras obtener algo concreto. No dejes que el conocimiento se estanque en tu mente, conviértelo en acción, exprésalo, haz algo útil para alguien con ello. Usa los proyectos, los mini-proyectos, los ensayos, los blogs, la escritura, las simulaciones, los programas pilotos, los prototipos, los experimentos, las contribuciones a los proyectos de otros y las comunidades de práctica como forma de visibilizar tu aprendizaje y desarrollarlo.
  5. Si no sabes algo, enséñalo. Es una de las mejoras formas de aprender. Enseña y escribe para multiplicar el efecto. Si eres realmente ambicioso, conviértete en mentor de alguien. ¿Por qué te crees que escribo en este blog?
  6. Conviértete en un maestro de la autorregulación y la automotivación. La iniciativa y la autonomía dependen de ellos. La libertad necesita de estos humildes ayudantes para desplegarse. No sería una mala idea echar un vistazo al curso de autorregulación y perseverancia de este blog.
  7. Convierte tu aprendizaje en algo social. Participa en comunidades de aprendizaje y grupos de estudio.  No basta con ser autodidacta, ve un paso más allá y sé un interdidacta.
  8. Busca un mentor y profesores excelentes que te ayuden, guíen y orienten a lo largo del camino. Cuando el aprendiz está preparado, aparece el maestro. ¡No pienses que los vas a encontrar necesariamente en escuelas, cursos y sistemas de aprendizaje tradicional!
  9. El mejor momento para hacer o aprender algo es cuando sientes dudas sobre si podrás hacerlo. Tírate a la piscina más a menudo y desarrolla una saludable mentalidad experimental. Empieza a escribir un buen Ridículum Vitae.
  10. Desarrolla una mentalidad de crecimiento con una teoría de la inteligencia dinámica. Nunca “eres inteligente”; en el mejor de los casos “estás siendo inteligente” en un momento y lugar concreto desarrollando una tarea particular. Olvídate del talento, eso pertenece a la mentalidad fija, a una teoría de la inteligencia como un monolito que asegura el éxito.

¿Qué te parecen estos diez mandamientos?

¿Bien?

Me alegro, pero… ¿acaso me has tomado por Dios?

Falta el mandamiento más importante:

11.   Rompe las tablas de la Ley de la sabiduría popular, incluidos los mandamientos anteriores,  y crea tus propias reglas y principios.

The TEN COMMANDMENTS

 El primer mandamiento debería ser: rompe las tablas de la ley y crea tus propios mandamientos.

Para saber más

Tengo la convicción de que nuestro sistema educativo no favorece los mandamientos anteriores, casi siempre los dificulta.

A veces tengo la sensación de ser un predicador que clama en el desierto, que dice «¿Pero es que acaso no veis lo que yo veo tan claro?».

Hoy la boca se ha quedado sin saliva y la tinta del bolígrafo secado y el computador colgado. Puedes seguir por aquí:

18 comentarios sobre “Los diez mandamientos del aprendizaje

    1. En teoría, no debería serlo. Pero en la práctica muchas veces lo es. Yo no estoy contra el profesionalismo titulado voluntario, aunque en general pienso que es poco flexible, lento y caro.

      1. Quiero responder a Homo Mínimus: En el librito «Cuentos ZEN para la vida diaria y los negocios de Mariano Merino hay un cuento 9. que dice: «Maestro, aparte de alimentarnos y dormir, ?qué es lo otro imprescindible que uno debe hacer todos los días? ? Adorar a los dioses y rendirles pleitesía? Hijo, los dioses seguirán tranquilos y felices si no te acuerdas de ellos, así que olvídate de ellos. Son dos cosas imprescindibles además de las que mencionas: cuidar tu cuerpo y enseňarle algo a alguien. Todo lo demás viene después.

    1. Sí, seguro que quiere decir lo que dice. Cuando lo entiendas y lo practiques habrás dado un gran paso en tu capacidad de aprendizaje.

      1. Entender, creo que entiendo lo que quiere decir, pero yo lo diría de otra manera. Con tu permiso: ‘Si no sabes algo, confiésalo. La única manera de aprender es reconocer tu ignorancia, y tienes que aprender algo antes de poder enseñar nada. En cuanto sepas de algo, enséñalo pronto [y escribe para multiplicar el efecto. Si eres realmente ambicioso, conviértete en mentor de alguien. ¿Por qué te crees que escribo en este blog?]

        En mi opinión, lo mejor de la palabra precisa es que no existe, por eso creo que es muy importante elegirlas con mucha atención.

        1. No. No me refiero a eso. No hay nada que confesar. Quizá tenga que escribir otro artículo para explicar lo que quiero decir. Doy por hecho ciertas ideas que son muy naturales en mí pero que son contraintuitivas para otros muchos.
          Repito lo que quiero decir: «la mejor manera de aprender algo es ponerse a enseñárselo a alguien».
          Prueba con ello. Verás lo que quiero decir.

          1. Muchas gracias. Creo que ahora entiendo lo que quieres decir: «La mejor manera de profundizar en tu conocimiento es compartiéndolo». De hecho, también profundizas en tu desconocimiento.

            No es exactamente lo mismo, pero tal vez te interese esta cita, de un tal Sir John Templeton, a quien no tengo el gusto, pero que Google me acaba de presentar: «Cuanto más humildes seamos en relación a lo que sabemos, más interés tendremos por aprender» («If we become increasingly humble about how little we know, we may be more eager to search»).

        2. Yo sin embargo lo interpreto de otra manera, esto es, el comprometerse a enseñar algo a alquien te obliga a profundizar más en el «engranaje» de lo que quieres enseñar, no solo por la misma presión de enseñarlo sino por que tienes que llegar al hueso del asunto, cosa que igual no harias si solo aprendieras para ti mismo..

          1. Pienso que, además, el conocimiento es un sucedáneo de la sabiduría, que es el conocimiento práctico. Enseñar a alguien ordena y consolida tus propios conocimientos. Vivir tus conocimientos es la forma de aprender realmente.

  1. Desde que sigo tu blog, aprendí muchas cosas. Tengo 71 aňos y como ves, estoy creciendo y aceptando muchas ideas nuevas.

  2. Tírate a la piscina. Atrévete. Dare greatly.
    Al fin y al cabo, es una versión del Para aprender, enseña.
    Aunque desde la perspectiva de asumir el reto, asumir el cambio, asumir el proceso, asumir el riesgo. Rendirse y saltar. Confiar.
    Suceda lo que suceda, será un aprendizaje. Y nos hará ser quién somos.

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