Solo los perdedores leen libros

Rafael Casado nos obsequió hace semanas con dos de los artículos más leídos de este blog: Cómo leer un libro con atención plena parte 1ª y parte 2ª.

Su fórmula es muy buena. Es sencilla. Está avalada por mi experiencia y por la de muchos otros: cuanto más pones, más recibes. Te haces preguntas antes de empezar, lees lentamente a lo largo de una o varias semanas,tomas notas, elaboras, usas mapas mentales y resumes. Os recomiendo, por supuesto, que leáis ambos artículos. Son excelentes.

Yo también he escrito varios artículos sobre la gestión de libros: la regla de los siete días de la compra de libros, para evitar las compras impulsivas,la regla del 3+3+3 de los libros y cómo leer libros minima-listamente.

Sin embargo, el enano discutidor que llevo dentro no está convencido. Cree que podemos ir más allá. Vamos a dar una vuelta de tuerca a la lectura de libros.

Mi tesis es la siguiente: leer libros está sobrevalorado.

Ya sé que es lo contrario de lo que has estado oyendo toda la vida: has de leer más, leer es bueno, has de leer aunque sea las etiquetas del champú, blablabla. No tengas miedo, algún día deberías ir más lejos de la sabiduría tradicional que te transmitieron tus maestros, padres y consejeros espirituales.

El problema no está en leer poco sino en leer demasiado. El recurso escaso no es la información; estamos infoxicados. Cuando sobra la información, cuando está en todos lados en forma de programas de televisión, cursos, libros, manuales, formato digital, pantallas de iPad, teléfonos móviles, etc., el recurso escaso es nuestra atención.

Has de hacer todo lo posible por evitar leer libros. Si consigues leer menos, no solo libros, sino también blogs (este blog incluido), tuits, comentarios en facebook, emails, etc., y si lo haces más selectivamente, es probable que aumentes tu disfrute y aprovechamiento de las lecturas.

¿Qué deberías hacer antes de considerar leer un libro?

En esencia: buscar todas las razones posibles para no leerlo.

Para lograrlo es mejor que partas de una actitud de atracción (tú has de atraer la información y los libros) y  evitar la presión que ejerce el entorno para que prestes atención a sus demandas y leas los libros con los que te topas.

Puedes ir más allá. Nunca pienses que encontrarás en un libro la respuesta a tus problemas. Mucho menos en un artículo de blog. Mucho menos en un mensaje en una red social. Por supuesto que jamás en una programa de televisión o una película.

En el principio, fueron los proyectos

La clave: los libros que leas han de estar ligados a proyectos personales. Un libro no es un proyecto, un libro es un medio para alcanzar algo con relevancia o significado personal en el marco de un proyecto explícito:

  • Primero tienes una visión, una panorámica de un estado de cosas futuro, luego tienes metas y objetivos que te permiten acercarte a esa visión soñada. Hasta aquí no necesitas libros para nada.
  • Después tienes que saber qué está ocurriendo a tu alrededor, cuál es la realidad actual en tu vida. Aquí los libros solo tienen un papel marginal. Lo fundamental es la capacidad de percepción de la realidad y las conexiones sociales, las personas.
  • Más adelante, necesitas una estrategia y un plan sencillo; aquí quizá te empiecen a venir bien los libros. Pero siempre muy seleccionados y nunca como primera opción, so pena de que quieras pasar el resto de tu vida sumergido en libros.
  • Por último, necesitas acción y revisar cada cierto tiempo las fases anteriores: visión-realidad actual-estrategia-planes-acciones.

Los libros son una pieza pequeña de ese engranaje, NUNCA la más importante.

La excepción a lo anterior es la lectura por entretenimiento o por placer. Que cada uno lea por los motivos que quiera, pero si lo que buscas es mejorar tu vida, aprender alguna habilidad o dominar alguna disciplina, los libros NO son la respuesta.

Me importa un bledo lo que te dijera tu mamá, lo que te dijera la maestra, lo que hayas oído que dicen los intelectuales. En la mayoría de los casos estarías mejor con menos libros.

¿Qué puedo hacer antes de leer un libro?

Primero. Tener un proyecto en el que encaje. Regla: si no hay proyecto personal, no hay libro. Lo primero es el proyecto, más adelante quizá venga algún libro.

Recuerda: el primer ingrediente del aprendizaje es la motivación. Si no tienes un proyecto, estarás leyendo solo por placer.

Segundo. Las personas siempre antes que los libros. Es mejor buscar personas que te puedan ayudar en tus metas que buscar libros. Incluso, si necesitas libros para alcanzar tus metas, has de empezar buscando personas que te conduzcan a los libros. Es mejor que sean personas de carne y hueso, expertos que sean buenos en aquello que quieres aprender; si no, usa medios digitales, blogs o artículos .

Recuerda: este es el tercer ingrediente del aprendizaje: la colaboración.

Tercero. Eres una cerda. Eres un cerdo. Mánchate con el fango de lo real. Si quieres pintar, pongamos por caso, puedes hacer mil cosas antes de leer un libro: puedes ver a alguien pintar; puedes ir a una tienda, comprar pinturas y ponerte a pintar sin más preparación; puedes pedir a un amigo que te enseñe a pintar; puedes usar lo que tienes a mano y hacer tus pinitos.

NO necesitas hacerlo perfecto ni seguir ninguna receta cuando estás empezando. De hecho, nada de lo que te cuenten en teoría tendrá demasiado sentido si no te has engorrinado, si no te has manchado con el barro de lo real.

Recuerda: este es el segundo ingrediente del aprendizaje: las aplicaciones.

Última barrera contra los libros

Supongamos ahora que después de todo lo anterior has localizado un buen libro. ¿Has de leerlo? ¡No!

No todo está perdido. Puedes hacer muchas cosas que te allanen el camino antes de empezar a leer un libro. Si tienes suerte, puede que no necesites leer el libro o solo una parte.

Yo siempre sigo estos pasos, aunque no todos siempre estén disponibles. Después de cada uno de ellos me pregunto: ¿Sé lo suficiente? ¿De verdad necesito aprender más? ¿En qué querría profundizar? ¿Merece la pena seguir buscando más información?

  1. Miro las críticas en amazon.com (si el libro es en inglés). Hay reseñas tan buenas que muchas veces decido no leer el libro. Leo siempre, al menos, la mejor y la peor.
  2. Pregunto a un amigo que lea mucho para saber si lo ha leído. Le pido un resumen oral de doscientas palabras.
  3. Busco un artículo o reseña en línea que me condense un libro de 300 páginas en 3 o menos.
  4. Leo una entrevista en la que el autor venga a hablar de su libro.
  5. Leo la solapas de los libros.
  6. Leo el prólogo y el capítulo final con las conclusiones. Esto lo puedo hacer de gorra en la librería en unos pocos minutos.
  7. Busco una conferencia en youtube del autor. Después de una presentación del libro de una hora no suelo necesitar leer el libro. O solo leo aquellas partes que me resultaron interesantes en la conferencia.
  8. Echo un vistazo al índice. Señalo qué capítulos puede tener sentido leer y cuáles son los prioritarios. ¿Quién dijo que un libro hay que leerlo en el orden de los capítulos? ¿Quién dijo que hay que leerlo todo?
  9. Me tomo uno o dos días de descanso.
  10. Si pasados esos días, sigo pensando que el libro es interesante, entonces me pongo a leerlo. Pero solo las partes que resulten relevantes para mi proyecto en curso.
  11. Sigo un método muy parecido al que presentó Rafael en Cómo leer un libro con atención plena 1º y 2º.

Mantra: solo los perdedores leéis libros.

Referencias del artículo:

20 comentarios sobre “Solo los perdedores leen libros

  1. Unas conclusiones personales:
    – Si vas a escribir un libro, y quieres venderlo, no des conferencias de 1h
    – Si vas a escribir un libro, y quieres venderlo, no pongas las conclusiones en el ultimo capítulo
    – Si vas a escribir un libro, y quieres venderlo, que el prólogo incite a leerlo

  2. Pues yo he decidido hacerte caso en una cosa, así que dejo de leer tu blog y me voy a los libros. La cosa es mucho más simple: lee si te apetece y disfrutando de lo que lees, sin tantos condicionantes.

  3. Yo casi que estoy contigo Esther… Leyendo los dos primeros post de Rafael Casado hace un par de meses pense.. pero vamos a ver, esto ya lo hacia yo en el cole.. donde esta el invento??? No se es como reinventar la rueda..Hoy los he vuelto a leer por si me habia perdido algo pero…no.. lo siento pero leer un libro de esta manera, sea del tema que sea, de autoayuda, programación, o como hacer circulillos con un canuto.. se llama estudiar.. de siempre, de toda la vida de dios vamos.. Otra cosa es que antes de desembolsar el parne compruebes que merece la pena.. como pasa con el cine.. que antes de ver una peli, lees las criticas y comentarios de gente que la haya visto… asi si luego es un truño pues no te pilla por sorpresa.. pero vamos lo de leer la solapas, leer el indice, leer las conclusiones…bla, bla, bla.. lo siento pero esta vez te has columpiao y bastante.. chao

    1. Los siento mucho, roseypunto. Te compensaré devolviéndote tu dinero y una pequeña indemnización por el tiempo perdido. Reitero mis disculpas. Un fuerte abrazo.

  4. Quien ha dicho que sea tiempo perdido?? Tiempo perdido el tuyo y el de Rafael testeando y escribiendo sobre algo que esta mas que establecido .. pero vamos yo no soy quien para decirte en que empleas tu tiempo… Soy una consumidora/compradora de libros por lo que tu comentario/sarcasmo no me toca lo más mínimo… creo que las rewiev y reseñas son lo peor que nos puede ocurrir a los que nos gusta leer.. el lector tiene derecho a emocionarse o decepcionarse tras la lectura de un libro sin tener una idea preconcebida de lo que se va a encontrar, sea de la tematica que sea y si puede que sea maravilloso ser un cerdo y meterse totalmente en el fango…. (por cierto ya me compre el libro de Toni Nadal)… Otro fuerte abrazo

    1. Mi tiempo nunca está perdido si hago un poco más feliz a la gente y me acuesto intentando que este mundo sea un poco mejor. Por eso me apena tu reacción visceral, como si te debiera algo o como si te hubiera ofendido. No era mi intención. Un beso en la mejilla sincero.

  5. Creo que por el título (sólo el título) este artículo entraría en Minimalismo Diabólico, pero tienes razón. Un libro de Cálculo no lo tengo que leer completo, sólo el capítulo o páginas que contengan el tema que necesito aprender/practicar. Creo que decidiste nombrar este artículo así para «obligar» a los suscriptores a leerlo. Conmigo funcionó, porque si se llamara «Cómo leer con atención plena 3 parte» no lo habría leído.

  6. Una de las partes más importantes del artículo es el recuadro: Leer libros no es una buena estrategia para buscar aprender una habilidad o dominar una disciplina.
    No se habla de la lectura por placer, sino de la lectura como una herramienta para alcanzar un resultado. ´
    Me ha pasado de tener en la mesita de luz el mismo pequeño libro por un año; leía partes al azar cada noche, me encantaba. Podría haber utilizado ese tiempo para leer otros libros nuevos pero era lectura por placer.
    Simultáneamente, si quiero aprender programación, tengo la opción de leer el libro de 300 páginas o comenzar un coursera o directamente con las manos en el fango empezar de cero y seguir un videotutorial en youtube. Las restricciones siempre van a ser el tiempo aplicado, mi atención. Y más que buscar placer, el foco va a ser en aprender eficazmente y aplicar esa habilidad lo más pronto posible.
    Mas allá del título provocador y la ofensa a los cerdos-lectores que están infoxicándose mientras leen este blog, me gusta mucho el análisis y la profundidad que están teniendo los últimos posts.

    Saludos,

  7. Huele a sangre!! jejeje. A mi me ha gustado tu post. Creo que la lectura compulsiva e «impuesta» desde fuera es una forma de matar el tiempo. Y matar el tiempo es matar tu vida, pues tiempos es lo único que tenemos. Aprender a discernir las lecturas que más nos puedan aportar en cada momento es importante. De lo contrario, también en este punto estaremos sucumbiendo a ese borreguismo tan extendido en todo lo demás. Dicho esto, mientras algunos ponían en práctica los filtros que numeras en el artículo, yo me he leído medio tocho jejeje. Gracias por extender el concepto minimalista a todo lo que se nos ofrece. Por cierto, si bajas algún día a Málaga y quieres completar tus 10.000 (o 30.000, si se tercia) pasos diarios en buena compañía, dímelo. Para mi será un placer.
    Jesús Millán

  8. Yo estoy bastante de acuerdo con la tesis.

    Pero yo no creo ser un perdedor por leer libros, sino que leo libros porque soy un perdedor. O fifty-fifty.

    (quizás lo único que me aportan los libros es hacerme consciente de que soy un perdedor… que lee libros; sin ellos quizás fuera un perdedor no consciente)

  9. Yo creo que seguir los once pasos que citas al final del artículo acabas gastando la misma cantidad de recursos que si lo pides prestado y lo lees. Lo que si me gusto es que leer un libro tiene que surgir de una necesidad de un proyecto, deben ser una herramienta y/o paso a seguir en la planificiación de un proyecto de aprendizaje.

    1. Ten en cuenta que esos pasos no son todos obligatorios ni siempre están disponibles. Son ocasiones para decidir qué nivel de complejidad y cantidad de información necesitas y volverte más consciente de tus lecturas.
      Si cualquiera de esos pasos te evita leer decenas o centenares de páginas merece la pena.

  10. Estos días de confinamiento a mi me han dado para mucho y he montado un huertito con mi pareja. No tengo ni idea del tema pero él sí. De niño cogió muchos tomates y muchas lechugas. Hemos plantado tomates, lechugas, melones, patatas, bonitatos, berenjenas, calabacines, fresas, un cerezo, un naranjo… Pues te puedes creer que no he mirado absolutamente NADA en internet… ¡Qué cosas! yo que soy de buscarlo todo… pues no… no se porqué pero al final nunca lo he hecho. Ahora me dice que no sabe cuando hay que coger el calabacín… bueno pues habrá que buscarlo porque yo tampoco sé.

    La semana pasada encontré un libro en eBiblio: Trabajos de mierda de David Graeber. El título me llamó la atención y leyendo el prólogo me sentí muy identificada. Habla de los curros no precarios ni mal pagados si no aquellos que si no existieran daría lo mismo porque estas de relleno. En una mañana me leí por encima lo que consideré oportuno y fuera, lo devolví.
    Hay muchos libros que tienen una idea o dos y el resto es pura paja… me ha pasado mogollón de veces y el tiempo es oro joer, no estamos pa tirarlo.

    Seguiré los consejillos que das para comprar mi próxima tanda de libros. Además es que ocupan espacio y valen pasta…con la tontería.

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